La Final se decide en los últimos cinco minutos
¡Qué igualdad! ¡Qué tensión! ¡Qué Final más emocionante!
Las txapelas de la XIII edición del Campeonato de Frontenis se las enfundaron Ibán Lacarra e Iker Lizarraga al ganar, contra pronóstico, a Rubén González y Pedro Oyarzun por 15 a 12 en un partido muy disputado.
El encuentro empezó igualado. Los primeros tantos se decantaban hacia uno u otro bando más por fallos de desgaste que por aciertos del rival. Los delanteros, Iker y Rubén, apenas entraban en juego y los zagueros se encargaban de devolver todo, o casi todo. Eso que no podían devolver era lo que subía al marcador, unas veces a favor de unos y otras a favor de los otros.
Ibán, de rojo, y Pedro, de azul, desde atrás hicieron un partido de desgaste. Pasada la media hora el marcador mostraba el empate a 6, tras cuatro empates previos a 1, a 2, a 4 y a 5. Más igualdad era casi imposible.
Pero poco a poco Iker Lizarraga fue entrando más en juego. Pese a los nervios que tenía por tener que suplir a Andoni Mitxelena, que por motivos laborables no pudo disputar la Final, Iker logró hacer un par de tantos en los cuadros alegres que hizo que la monotonía de los pelotazos hacia atrás dejara paso a unos momentos más emocionantes. La Final empezaba a disputarse también adelante.
Rubén, con más experiencia, no supo contrarrestar esos ataques de Iker y, por momentos, parecía más agarrotado que el propio Iker que, pese a debutar en una gran final, fue el que más se atrevió a hacer dejadas y dobles paredes. Y poco a poco Iker se lo empezó a creer. Y así fue, a falta de cinco minutos Iker abrió una brecha de dos tantos que parecía insalvable. El marcador lo pusieron los rojos en un 13 a 11. Y ahí estuvo la clave, en Iker, en su saber apostar pese a la gran presión que tuvo que soportar en los días previos sabiendo que era el convidado de piedra. Y, sin embargo, a la postre fue el protagonista de la Final y, en consecuencia, el jugador del Campeonato.
Cuando ya faltaba muy poco tiempo, Pedro lo intentó desde atrás, intentando bajar la pelota, poniéndola entre los dos... Pero ya era tarde. Ya no pudo hacer nada ante Ibán e Iker que iban dando pelotazos y dejando pasar el tiempo. Al final, tres tantos de diferencia y un gran partido. Los dos zagueros, como siempre, a gran nivel, impresionantes, e Iker poniendo el fuego, con unos pocos fogonazos, en su gran Final. Siempre se acordará de ella.
El día anterior se disputaron las otras dos finales.
En primera categoría la Final de consolación no tuvo color y Juanjo Montes e Iker Fernández ganaron cómodamente a Oscar Herás y Javier Muneta por un claro 30 a 15.
Y en segunda categoría, Ibai Pla y Xabi Ciriza hicieron lo propio con Pablo Gil y Javier Lizarbe: 30 a 14.
Fotografías: Ángel Alberca y Oscar Herás.
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