Rubén jugo a un gran nivel y siempre que pudo apretó a Ramón hasta hacerle mucho daño en los cuadros delanteros del frontón. Por su parte Carlos cumplió con creces en la final y fue, sin duda alguna, la figura del partido. Mantuvo a raya los continuos ataques de Juanjo y contraatacó y envió todas las pelotas con mucho sentido. Cuando quedaban tres minutos para el final del partido y Juanjo y Ramón a duras penas sólo podían mantener en el marcador una pequeña ventaja, Rubén y Carlos empezaron a vislumbrar el camino de la victoria.
La clave era aguantar los envites del contrario y forzar los fallos por falta de paciencia y concentración de ellos. En esas circunstancias agónicas del partido es donde mejor se deselvuenve Rubén y, sobre todo, Carlos. Al final, cuando la bocina sonaba atronadora anunciando el final del partido y el marcador aún reflejaba empate a 28, el último tanto se hizo de rogar. Parecía como si ese tanto no quisiera poner punto final al Campeonato. Finalmente, éste se decantó a favor de los de blanco, jugadores que en esos instantes estaban jugando mejor y se encontraban más enteros psicológicamente.
Una vez entregadas las txapelas a los ganadores del torneo, el resto de los finalistas del día posaron en el pódium para dejar grabado visualmente el resumen de una tarde y noche llena de grandes emociones y donde seguro que la adrenalina empezó a dejar paso a los ánimos de revancha deportiva que tendrán su oportunidad en la cada vez más próxima tercera edición del Campeonato de Frontenis Antsoain.
Reportaje fotográfico de Ángel Alberca y Miguel Ángel Larios
El encuentro se presentaba a priori sin un pronóstico claro por la ausencia de un jugador titular en cada pareja y la consiguiente incógnita que sobre el papel representaban dos jugadores nóveles que tenían que hacer frente a su primer partido oficial desde hacia mucho tiempo y, nada más y nada menos, que en una final. 
Al principio del choque Gonzalo, al igual que hizó en la semifinal de la semana pasada, empezó a imponer su ley y pronto los verdes comenzaron a distanciarse poco a poco en el marcador. No obstante, la experiencia de Mikel hizo que pronto las distancias se recortaran hasta 13 iguales.
La suerte y el destino hicieron justicia y Gonzalo y Rispis ganaron la contienda y pudieron brindar así su triunfo a Carlos Chavarren, que junto con Gonzalo, habían protagonizado la semana pasada una grandísima semifinal en la que también sólo perdieron por un sólo tanto y ante los que a la postre resultarían campeones de este torneo. 
La nota más destacada de todo el juego fue el compañerismo del que hicieron gala los cuatro deportistas y que deseamos tenga su continuación en la próxima edición del torneo.
De Mikel y Joseba hay que destacar el magnífico final de campeonato que habían realizado hasta el día de la semifinal. En este último encuentro, por el contrario, nada tuvieron destacable. No fue su día y además la chapa se empeñó en amargarles la noche, especialmente al delantero Mikel.
Desde el primer tanto se vio que el partido iba a ser duro, igualado y muy disputado, como al final así resultó. El marcador siempre fue reflejando pequeñas ventajas a favor de Carlos y Gonzalo, aunque nunca lograron distanciarse más de media docena de tantos. Sin lugar a dudas, las figuras del partido fueron los dos zagueros. Es de reseñar especialmente el partidazo que hizo Gonzalo, su mejor partido en lo que lleva de campeonato, muy concentrado, restando todo lo que le echaban y con arrojo suficiente para, en determinados momentos del partido, jugársela, lanzar la pelota a los cuadros alegres y hacer varios tantos de gran belleza. El delantero Carlos Chavarren fue su fiel escudero, le quitó trabajo cuando había que hacerlo y cumplió con su misión, sin arriesgar más de la cuenta durante todo el encuentro.
Excepto los cinco primeros tantos, donde se pudo observar una contienda disputada, el resto del choque fue un auténtico paseo triunfal para los líderes invictos del grupo A. Cuando Ramón y 
Quizás la presión de jugar un partido de estas características les pesó como una losa ya que en ningún momento pudieron exhibir el gran juego que habían desarrollado durante la liga regular. 
Como botón de muestra esta fotografía donde aparecen jugadores de cuatro parejas diferentes después de jugar un partido el sábado 3 de enero. De izquierda a derecha: Mikel Izkieta (de la pareja B1), Beñat Villanueva (B4), Rubén Martínez (B7) e Iker Fernández (A8).
Gracias a las ideas y aportaciones de varios participantes, para esta fase final hay dos novedades importantes. En primer lugar, los jugadores vestirán las camisetas que se han hecho expresamente para el campeonato. Cada jugador finalista está pagando sólo 6 € por la camiseta. El precio es muy módico teniendo en cuenta la colaboración económica de nuestras dos entidades patrocinadoras (
Los colores de las camisetas pueden ser azul, rojo, blanco, naranja y verde, y las tallas, siempre de manera orientativa, son S (chicas y chicos hasta 70 kg), M (70 - 75 kg), L (75 - 82 kg) y XL (más de 83 kg). De todos modos, para elegir mejor la talla y el color de las camisetas el día de la fiesta final se llevará el catálogo de las prendas y también se podrán ver puestas en los jugadores finalistas.
Por último, desde aquí, y en nombre de todos los participantes, queremos mandar un caluroso abrazo a Marcos e Iker Fernández, por el reciente fallecimiento de la madre y abuela, respectivamente.
